Acerca de la campaña
Juntas Logramos Más
Hablamos diferentes lenguas y formamos parte de distintas luchas, pero tenemos un interés común en la protección y cuidado de todas las formas de vida que habitan en nuestros territorios. Nuestros caminos se cruzaron por primera vez en noviembre de 2019 en Guelatao, Oaxaca, durante un encuentro organizado por la colectiva La Sandía Digital, con el apoyo del Fondo Semillas, en el cual decidimos lanzar esta campaña.
En nuestros pueblos y organizaciones, hablamos castellano, c’omcaac, chol, chontal, maya, mazahua, náhuatl, ñomndaa, odami, otomí, p’urhépecha, tutunaku, tzeltal, tzotzil, yoeme, zapoteco y zoque. Desde nuestras diversidades culturales y geográficas, lo que amamos es narrarnos y tejernos, contándonos las realidades (a veces mágicas, a veces trágicas), de los territorios que habitamos y nuestras experiencias como mujeres que cuidan los bienes comunes y los defienden ante el avance de megaproyectos extractivos y de infraestructura.
A todas nos une el sentimiento de profundo arraigo a los lugares donde nacimos y vivimos. El deseo de dedicarles tiempo y energía para que no se pierdan los conocimientos, lenguas, semillas, tierras, fuentes de agua y sitios sagrados que albergan.
A todas nos une el rechazo a las minas, las hidroeléctricas, los gasoductos, la extracción de hidrocarburos, el fracking, los proyectos agroindustriales, y todos los proyectos de sobreexplotación y destrucción de la tierra que se imponen en nuestros territorios para servir a intereses individuales y capitalistas.
A todas nos une la voluntad de acabar con las violencias, la discriminación y la criminalización que sufrimos por ser mujeres, y por oponernos firmemente al despojo y la desaparición de nuestros pueblos.
A todas nos une la práctica del autocuidado como herramienta vital para seguir luchando con alegría, así como la creencia en el poder que tienen los relatos para fortalecer nuestras luchas y transformar corazones.